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Ubicado en la Calle Murillo 1, justo al lado de la Plaza de Olavide en Madrid, el restaurante Gingerboy ha sabido en sus cuatro años de vida ganarse una buena reputación entre los vecinos de su zona de influencia que alcanza los barrios de Chamberí, Argüelles, Chueca, Malasaña, Cuatro Caminos y areas de Salamanca, el Viso y Chamartín. Inaugurado en 2009 por Ron Zohar y el chef sueco Andreas Boman, Gingerboy, se caracteriza por una buena relación calidad-precio y por ofrecer una exitosa fórmula del take away partiendo de una original cocina fusión tailadensa con platos realmente innovadores. De este modo en su carta encontramos recetas tradicionales de este tipo de gastronomía como los rollitos vietnamitas, pad thai, arroz frito taiwanés.., pero también sorprenden con sus croquetas thai, sabrosas hamburguesas de cordero o  un original gazpacho tailandés!!

¿Las claves de su negocio? Un take away de calidad

La alta cocina fusión para llevar de Gingerboy es la clave su negocio, aunque el pequeño local que tienen en Chamberí acepta a unas cuatro o cinco personas comiendo de pie en una pequeña barra.

Otras claves de su éxito están en su simpático packaging que mantiene la comida perfectamente caliente. Además cabe señalar que sus envases son respetuosos con el medio ambiente. Por último, otro factor clave en su éxito es que sus chefs sorprenden con platos especiales todas las noches, y ofrecen un menú de mediodía que destaca no sólo por su sofisticada elaboración, sino también por su generosa medida.  www.gingerboy.es