Rodrigo Domínguez | Madrid

¿Sabéis el gusto que da llegar a un restaurante, pedir que te recomienden un vino y que el camarero resulte ser, además, sumiller y te dejé con la boca abierta con sus conocimientos? Los que no somos expertos en cultura vitivinícola supongo que somos fáciles de impresionar, pero amigos y amigas del mundo hostelero, aunque no seamos expertos, se nota, se aprecia, se valora y se fideliza.

Con un equipo de sala bien formado en conocimientos culinarios no sólo conseguirás fidelizar a la clientela y aumentar de manera directa las ventas ofreciendo los mejores productos de tu bodega. Además, tu restaurante como entidad tendrá un valor superior.

A riesgo de ser pesados, insistimos en el tema de la formación. Hace falta para los que gestionan un restaurante, pero también deben responsabilizarse de que el resto del equipo aumente su educación en temas concretos.

Esta semana nuestro amigo Carles del Bar del Pla (Carrer Mocada, 2. Barcelona) nos contaba que lanzan una nueva edición de su programa ‘Adopta una bodega’, una iniciativa que cumple ya más de un año. El próximo sábado 21 de octubre contarán en su local con la presencia de responsables de Clos Figueras para que expliquen, para que escuchen y para dar la oportunidad a equipo y clientes de aprender un poquito más sobre el mundo del vino y de la magnífica zona de El Priorat.

Lectura recomendada: Ideas originales: lleva la bodega a tu restaurante.

Lo que está ocurriendo es que existe una clientela que aprecia y disfruta cuando un restaurante ofrece sus conocimientos sobre el mundo del vino. Conclusión: hay que formarse.

También hace unos días nos encontrábamos con la XIV edición del Curso Especialista Sumiller que organiza la Escuela de Hostelería de Bilbao, una formación orientada a profesionales. Según explican desde la Escuela, la persona que se forme en este curso saldrá preparada para ser responsable de la gestión de la bodega, incluyendo la compra y rotación de vinos, y el encargado de crear la carta. Se podrá ocupar también de asesorar al cliente sobre el mejor maridaje para acompañar los platos y sugerir otros productos del restaurante: Aceite, café o licores.

Aprovechamos que comienza septiembre para recomendar a todos los lectores que miren detenidamente e investiguen sobre los cursos de formación que se ofrecen desde las escuelas de hostelería de las diferentes regiones, universidades, talleres. Cualquiera que sea aplicable al trabajo es positivo para el negocio.