Decora tu mesa en Navidad

Las navidades son esperadas por muchos sectores como el de la restauración, que ven en este periodo una muy buena oportunidad para hacer negocio, y conseguir fidelizar al cliente para futuras ocasiones.
Durante estas fiestas, los bares, restaurantes y hoteles se llenan para acoger a un grupo de personas que buscan disfrutar con sus amigos, a la vez que degustar un buen menú que se ajuste a sus necesidades. Con tanta oferta donde elegir, el dueño del local debe ser consciente de la oportunidad que tiene de convencer al cliente y agradarle para que en un futuro vuelva a repetir. El servicio ofrecido se convierte en un arma decisiva para decantarse por uno u otro local.
Razón por la que nuestro experto del canal, José Ángel Sierra, brinda las claves sobre cómo ofrecer un servicio excelente en este tipo de ocasiones. Es fundamental cuidar todos los detalles, ya que en reuniones como éstas, todo debe ir marcado por protocolo.
Protocolo a seguir en Navidad
– Montaje de mesa: hay que tener en cuenta las características del local y su espacio, ya que cada comensal ocupa 1’5 m2. Más o menos, el espacio de cada comensal en mesa es de 60 cm como invitado, y de 70 cm si se encuentra en mesa de presidencia o en mesa imperial.
– Colocación del material: Debemos empezar por la altura de las mesas que deben estar en una franja entre los 76 y 80 cm. También, contar con un muletón para absorber líquidos derramados, amortiguar los golpes o ruidos en la mesa y facilitar la sujeción del mantel, evitando que éste se mueva, es una gran opción.
– El mantel debe tener una caída de al menos la altura del asiento de la mesa, y a continuación dependiendo del servicio, se podrá montar para carta con diferentes detalles a tener en cuenta, para menú o por otro lado para menú concertado.
Con la silla colocada en el lugar correcto, desde detrás de la misma, se hace todo el montaje para que quede como si de una tarta perfecta se tratara, con cada utensilio en su lugar y orden.
– No olvidar elementos como el plato base o de presentación que es el que da lugar al espacio reservado a cada comensal, o los cubiertos que deben incorporarse en la mesa con el fin de que estén marcados los platos que se van a degustar.
– Colocación de platos: siempre se comienza a marcar por el último plato, antes del postre y así hasta llegar al primer plato, siempre y cuando no supere los cinco cubiertos por lado, perfectamente colocados en perpendicular al comensal a no más de 4 milímetros, uno del otro. Como norma, si hubiera un cubierto que por su tamaño o forma, rompiese con la estética de los demás, se colocará en la parte superior derecha de forma oblicua, (el caso de una cucharilla para sorbete por ejemplo, también pasa con pinzas de mariscos, caracoles, etc.)
– Los cubiertos de postre deben estar en la parte superior del plato hacia el centro de la mesa de forma horizontal y con las empuñaduras concordando con la mano a usar. Siempre en este orden, de fuera hacia dentro, cuchara de postre, cuchillo de postre, y tenedor de postre.
– El plato de pan tiene que estar colocado a la izquierda de este servicio y con tres posiciones dependiendo de la anchura de la mesa.
– Las copas deben estar bien alineadas en sus tres opciones (línea horizontal o recta, oblicua o en triángulo), en el orden de las bebidas. La de agua va en el centro de la línea del comensal, y las demás copas de vino u otra bebida, a la derecha, si acompañan a los primeros platos antes del postre y, las demás, a la izquierda de la de agua o por detrás si forman triángulo.
Por último, dejar una servilleta sobre el plato trinchero y el resto del (petit ménage) salero, pimentero… que se colocan en el centro de la mesa.
Decoración navideña
La decoración ha de ser temática o minimalista. Por regla general se opta por el reino vegetal con sus diferentes características. Se puede optar por una línea flora más seria y solemne o bien por una frutal más animada y más acogedora.
En cuanto a los colores, debemos tener en cuenta la base de verde, por lo que estaría bien poner algo de blanco ya sea por el mantel o por algún otro producto. El resto de colores tiene que ser equilibrado en su conjunto.
Y mi último consejo es que, para aquellos que quieran ofrecer un plus en su servicio y conseguir esa diferenciación con la competencia, la decoración navideña también puede presentarse con otros productos más singulares. Por ejemplo, una sandía tallada y decorada con motivos navideños entre otros. Otro elemento puede ser un barco en alta mar entre las olas de un melón, algo que puede alegrar la vista a los comensales para desearles que sus sueños en este nuevo año, lleguen a buen puerto.
Ideas, algunas imprescindibles y otras opcionales, para conseguir como siempre, un servicio excelente.