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Alexandra Sumasi| Madrid

13 noviembre 2012

Chema de Isidro es cocinero. Con la crisis se ha reconvertido en cocinero docente, una actividad que le guste y con la que no le está yendo nada mal. Además, ha sabido explotar muy bien su faceta de comunicador escribiendo interesantes libros de cocina y nutrición y presentando programas de televisión. Tiene un restaurante, Bellalola, que ha aprovechado como multiespacio gastronómico.

En los últimos tiempos te estás dedicando mucho a la docencia. ¿Cómo te dio por ahí?

Querida Alexandra, los tiempos cambian y hay que adaptarse a lo que el público demanda. Hoy en día, creo que con toda seguridad puedo afirmar que la gente se interesa más por aprender a cocinar y así disfrutar de su ocio en casa porque, desgraciadamente, no está la cosa para demasiadas salidas a restaurantes.

¿Es la docencia una buena salida para muchos cocineros?

Creo que hay que hacer lo que se siente en cada momento, a mi me gusta cocinar, sea cual sea la versión, pero te aseguro que es un regalo cuando alguien a quien le has enseñado a hacer un plato te manda un mail diciéndote que ha triunfado. Y sí, está claro que hoy en día enseñar cocina es una buena opción, pero siempre que te sientas a gusto contigo mismo, y sobre todo creo que hay que tener capacidad para transmitir.

Por lo tanto, ¿te está yendo bien profesionalmente hablando?

Te puedo asegurar que en una semana doy, de media, cursos a unas 200 personas, y hay semanas que en el restaurante no pasan tantos comensales.

¿Sigue siendo Bellalola un restaurante?

Es un espacio gastronómico, es un restaurante, también aula gastronómica y sobre todo un lugar donde se vive la cocina como cultura. En Bellalola ahora doy clases los días de diario,  y los fines de semana funciona como restaurante y como aula gastronómica, o sea, 16 horas que me meto para el cuerpo.

Además de tu faceta de profesor, escribes libros y presentas programas de tele. ¿Eres un privilegiado o eso es una tarea alcanzable para cualquier cocinero con ganas de comunicar?

Ambas cosas. Solo hace falta ganas, mucho esfuerzo y, sobre todo, pasión. Yo me dedico a disfrutar de mi trabajo y no espero nada, pero fíjate que la vida te devuelve lo que has sembrado.

¿Algún proyecto en ciernes?

Sí, ‘Cocineros por el mundo’, un programa de televisión en el que 12 cocineros nos trasladamos a 12 países para hacer una acción benéfica, una gran obra social de ámbito mundial, un proyecto maravilloso.